! Como fue tu celebracion bautismal.!

1. ¿Es obligatorio ir a misa?
Aquí tienes dos artículos muy interesantes al respecto:

http://es.catholic.net/temacontrovertido/174/1568/articulo.php?id=7774
http://es.catholic.net/temacontrovertido/174/1568/articulo.php?id=157
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• PREGUNTAS SOBRE OTROS TEMAS
1. Me llega información confusa sobre el Opus Dei y no sé que pensar...
Los medios de comunicación a veces ofrecen información que no se ajusta a la realidad, en muchas ocasiones es debido a que ellos son los primeros a los que les falta alguien que les diga la verdad.

Lo mejor es acudir a la fuente de información, en la web del Opus Dei está todo muy bien organizado, también hay muchos blogs que están hechos de buena fe y videos. Si tus dudas son por el libro 'El Código da Vinci', aquí están las respuestas.
2. ¿Qué condiciones hay para ser padrino en un bautismo?
Canon 872: "En la medida de lo posible, a quien va a recibir el bautismo se le ha de dar un padrino, cuya función es asistir en su iniciación cristiana al adulto que se bautiza, y, juntamente con los padres, presentar al niño que va a recibir el bautismo y procurar que después lleve una vida cristiana congruente con el bautismo y cumpla fielmente las obligaciones inherentes al mismo."

Más información en: Los padrinos del bautismo en el derecho canónico.
3. ¿Qué es el jubileo? ¿y la indulgencia plenaria?
Por jubileo se entiende ganar la Indulgencia Plenaria o Jubilar.
La indulgencia es la remisión ante Dios de la pena temporal por los pecados, ya perdonados, en cuanto a la culpa, que un fiel dispuesto y cumpliendo determinadas condiciones consigue por mediación de la Iglesia, la cual, como administradora de la redención, distribuye y aplica con autoridad el tesoro de la satisfacciones de Cristo y de los santos". (Catecismo de la Iglesia Católica, n. 1.471).
"Culmen del Jubileo es el encuentro con Dios Padre por medio de Cristo Salvador, presente en su Iglesia, especialmente en sus Sacramentos. Por eso, todo el camino jubilar tiene como punto de partida y de llegada la celebración del sacramento de la Penitencia y de la Eucaristía". (Bula Incarnationis Mysterium).
REQUISITOS:

A.- Confesión y Comunión.
      De forma individual e íntegra.
      La Comunión conviene que se reciba el mismo día.
B.- Oración por las intenciones del Papa.
      Padre nuestro, Avemaría y Credo en el lugar donde se hace la peregrinación. C.- Cumplir con las obras establecidas por la Iglesia.
      - Como, por ejemplo, rezar el Santo Rosario en familia, el Via Crucis en la Iglesia, meditar sobre la palabra de Dios durante al menos 30 minutos, o adorarle en el Santísimo Sacramento durante ese mismo tiempo.
      - O visitando en lugares como Roma o Tierra Santa las Basílicas dispuestas y participando allí en la Santa Misa o en otro ejercicio de piedad (Vía Crucis, Sto. Rosario, adoración eucarística o meditación).
      - Si se trata del Año Santo de un lugar concreto (Santiago de Compostela, Caravaca de la Cruz, etc.) la peregrinación será a ese lugar. Participando allí en la Santa Misa o en otro ejercicio de piedad (Vía Crucis, Sto. Rosario, adoración eucarística o meditación).
      - También puede ser en cada lugar, yendo a visitar por un tiempo conveniente a personas necesitadas o con dificultades (enfermos, ancianos, presos, etc.), como haciendo una peregrinación hacia Cristo presente en ellos, cumpliendo los requisitos espirituales acostumbrados, sacramentales y de oración.

Estas mismas indulgencias plenarias pueden ofrecerse por las almas de los difuntos. “Desde los primeros tiempos, la Iglesia ha honrado la memoria de los difuntos y ha ofrecido sufragios en su favor, en particular el sacrificio eucarístico (cf. DS 856), para que, una vez purificados, puedan llegar a la visión beatífica de Dios. La Iglesia también recomienda las limosnas, las indulgencias y las obras de penitencia en favor de los difuntos. Llevémosles socorros y hagamos su conmemoración. Si los hijos de Job fueron purificados por el sacrificio de su Padre (cf. Jb 1, 5), ¿por qué habríamos de dudar de que nuestras ofrendas por los muertos les lleven un cierto consuelo?”(Catecismo de la Iglesia Católica, n. 1.032).                                                                                                  

Para más información consultar el libro "Historia de la liturgia" de Mario Righetti (BAC, 1956)